¿Cuánto le cuesta una mala arquitectura informática?
Durante años, las empresas han tenido que lidiar con una arquitectura de TI incapaz de cambiar. Esto se debe en gran medida a la acumulación de capas de tecnología a lo largo de los años. Tecnología añadida, normalmente, para resolver problemas tácticos, como la necesidad de un sistema ERP, una nueva base de datos para la inteligencia empresarial, o simplemente para tener la última y mejor tecnología en casa.
Sin embargo, la adición de cada capa de tecnología provocaba más complejidad. Más complejidad provocó más costes, así como la incapacidad de cambiar la infraestructura de TI para adaptarse a las necesidades cambiantes del negocio. En otras palabras, hemos creado una mala arquitectura que claramente nos está costando mucho dinero, así como oportunidades de negocio perdidas.
La computación en la nube nos brinda la oportunidad de tener algunos aspectos de la arquitectura en un estado más saludable. Sin embargo, al igual que con otras tecnologías, hay que tener cuidado para asegurarse de que se aprovechan correctamente las plataformas basadas en la nube. La disciplina y la planificación siguen siendo caminos clave para el éxito.
En muchos casos, las empresas están pagando de 3 a 5 veces la cantidad de dinero que deberían gastar en operaciones. Además, los costes en torno a la falta de agilidad del negocio debido a la complejidad innecesaria podrían ser enormes, teniendo en cuenta las oportunidades de negocio perdidas, como la incapacidad de entrar en nuevos mercados de manera oportuna.
El impacto de una mala arquitectura informática
Sabemos que el aumento de la complejidad provocado por las malas arquitecturas y la falta de planificación hace que ocurran algunas cosas:
- En primer lugar, los costes aumentan. Las infraestructuras complejas son mucho más difíciles y, por tanto, más costosas de mantener. Se necesita más personal, más tecnología y más recursos para operar estos sistemas a largo plazo.
- En segundo lugar, la eficiencia disminuye. Las infraestructuras de TI demasiado complejas son mucho menos eficientes y, por tanto, no pueden satisfacer las necesidades de la empresa. Estas arquitecturas informáticas subóptimas requieren más recursos para un rendimiento decreciente.
- Por último, la falta de agilidad del negocio. Esto significa que la infraestructura de TI carece de agilidad, o la capacidad de adaptarse a las necesidades cambiantes del negocio debido a la latencia requerida para cambiar cosas que son complejas y por lo tanto difíciles de cambiar.
La nube ofrece soluciones
El uso de la computación en nube aporta ciertas ventajas. La agilidad empresarial se convierte en la principal razón para pasarse a la computación en nube, a fin de cuentas.
Aunque los proveedores y analistas señalarán la capacidad de la computación en nube para reducir la necesidad de adquirir nuevo hardware y software (OpEx), la capacidad de cambiar la naturaleza del negocio es donde las empresas suelen encontrar el valor. Esto se ha demostrado una y otra vez en los últimos años, cuando hemos puesto en marcha las primeras instancias de la nube.
La correcta planificación de la arquitectura es primordial
Los informáticos se apresuran a señalar que una mala arquitectura no es más que una función de las necesidades de la empresa impulsadas por los acontecimientos. Cuando los informáticos se centran en resolver una serie de problemas, eso limita el tiempo y los recursos para hacer la arquitectura y la planificación adecuadas.
Sin embargo, la falta de planificación y el hecho de no dedicar tiempo a pensar en la arquitectura tienen un alto coste. Esto incluye a los que crean la arquitectura empresarial para una empresa de Global 2000, o quizás crean la arquitectura para un único sistema crítico para el negocio.
Los resultados finales, y los costes, son los mismos. Es sólo una cuestión de escala.